Datos personales

Nací en Córdoba. Mis compañeros de estudios en el Instituto Fidiana me llamaban Tovarich. Participé en las movilizaciones fidianeras reivindicando tener un edificio propio. Miembro de la Plataforma de Estudiantes de la JOC. Militante de la JOC (1996-2001). Presidente del Consejo de Estudiantes de Filosofía y Letras de la UCO en el curso 97/98. Militante del Partido Comunista de España desde 1997, del que he sido Secretario Provincial en Córdoba desde marzo de 2010 hasta noviembre de 2011. Director de cordobaroja.es

jueves, 5 de diciembre de 2013

Marx ha muerto. las ganas

En este año que se acaba se han cumplido los 130 años de la muerte de Karl Marx, con tal motivo, me encargó un pequeño artículo sobre la vigencia del marxismo hoy, para el periódico Diagonal. ver el artículo aquí.

Se cumplen 130 años de la muerte del filósofo, economista y revolucionario que nunca ha muerto. En los años 90, en pleno tsunami neoliberal, poseía una camiseta con el lema que sirve de título a este artículo, que me han pedido desde Diagonal. Hoy la vigencia del pensamiento de Karl Marx está fuera de toda duda, basta con leer la prensa para ver que plusvalía, ejército de reserva o lucha de clases están en nuestra realidad de 2013.
Basta leer la prensa para ver que ‘plusvalía’, ‘ejército de reserva’ o ‘lucha de clases’ son términos vigentes“El FMI proporcionó recientemente una simulación de un ‘pacto social’ de amplia base entre emprendedores y sindicatos en una devaluación interna: el aumento del empleo (y los recortes de precios) a cambio de que los sindicatos acuerden la moderación salarial significativa”, Olli Rehn (Co­misión Europea). Esta frase forma parte el artículo que este jerarca de la UE escribió en su blog en apoyo a la propuesta que unos días antes había formulado, en un informe, el FMI el pasado verano. En definitiva el consejo que FMI y UE hacen a España no es otra cosa que para salir de la crisis hay que moderar los salarios. Dicho en marxista: se trata de plusvalía. La salida que se ofrece a la crisis es que el trozo de la tarta que el capital saca del trabajo del asalariado sea mayor; es decir, aumentar la plusvalía, la explotación del trabajador.“Por supuesto que hay lucha de clases, y la vamos ganando los ricos”. Lo dijo Warren Buffet, uno de los hombres más ricos del mundo.

“Hay que aceptar trabajos aunque sea en Laponia”, José Luis Feito (CEOE).Esta frase fue pronunciada aún no hace dos años, generando cierta polémica por la aspiración que expresaba este dirigente empresarial. Pero lo realmente interesante es que, en definitiva, este portavoz de los empresarios españoles está expresando como deseo algo que Marx formuló en su día como “ejército de reserva” de parados.
Al fin y al cabo, lo que la CEOE expresa con esa frase es una fuerza de trabajo que haga sin rechistar (“aunque sea en Laponia”) lo que el capitalista necesite. Unos trabajadores disciplinados y sumisos por el terror a quedarse en paro, justo lo que el de Tréveris escribió en El Capital. No digamos nada sobre la cotidianidad de tantos trabajadores que “tragan” con lo que sea con tal de llevar un sueldo a su casa. El paro, o el miedo al paro, disciplina como lo expresó Karl Marx hace más de 14 décadas.
 “Por supuesto que hay lucha de clases, y la vamos ganando los ricos”. Lo dijo Warren Buffet, uno de los hombres más ricos del mundo. En los años 90 los voceros del capitalismo, simbolizados en Francis Fukuyama, se lanzaron a enterrar, no ya al marxismo, sino a cualquier posibilidad de transformación de la sociedad. El “fin de la historia” de Fukuyama significaba el triunfo definitivo del capitalismo. Sin embargo, la historia no finalizó, y en 1999, sólo una década después de la tesis de Fu­kuyama, el capitalismo volvió a tener antítesis que lo cuestionaban; en Seattle, nacía el movimiento antiglobalización, en paralelo el proceso revolucionario venezolano trataba de construir una alternativa al neoliberalismo. En definitiva, ambas realidades no eran otra cosa que lucha de clases; el altermundialismo y el socialismo del siglo XXI son la representación de los de abajo; de los trabajadores del mundo frente a los “mercados”, careta nueva del capitalismo de siempre. Cuando en los últimos años las calles se llenan de Indignación, hablando del “99%” frente al 1% más rico, Karl Marx vive.